A esa amiga del alma,
que sin querer poco sé de ella;
Siempre te siento cerquita...
y en mis pensamientos presente estas;
que aunque soñar querría contigo;
pecar por ti... yo no quiero.
Aunque en mi corazón te llevo...
también dueña eres de mis deseos;
Que un espíritu libre,
vale más que mil deseos,
y que me estreches en tus brazos...
eso sería todo un sueño.
Y pecar por ese sueño...
¡Eso sería merecer un dulce infierno!
¡Eso sería merecer un dulce infierno!
pues quedándome contigo,
nublaría de mí... los recuerdos.
Recuerdos que nunca tuve,
Envolviéndose
Que los deseos no sean de nadie...
y de todos al mismo tiempo.
Aunque tú estés tan lejos...
nunca olvides amiga del alma mía;
nunca olvides amiga del alma mía;
que en todo momento,
muy cerquita de mí... yo te siento...
muy cerquita de mí... yo te siento...
Y que sí es tu deseo,
por siempre y para siempre,
a tu lado quiero estar;
por siempre y para siempre,
a tu lado quiero estar;
y así en la distancia,
juntos crear un mundo,
mágico y de ilusión,
por toda la eternidad.
juntos crear un mundo,
mágico y de ilusión,
por toda la eternidad.
Enrique Nieto rubio
*Derechos Reservados*
colabora en imagen
Silvia Regina Cossio Cámara.
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