lunes, 27 de octubre de 2014

.Días de difuntos de Enricostro.



Cuánto tiempo te esperé,
 que hasta la noche me envolvió, 
llorando un amor se quedó, 
esperando esa pasión.
*
Cuánto tiempo esperé,
 que encendieras mi ilusión, 
pero nunca tú llegaste,
 y mi amor todo murió. 
*
Ya nos veremos allí,
 donde duerme el corazón, 
y las noches son eternas,
 donde ya no hay olas de pasión. 
*
Pero si tú, aún me quieres...
puedes venir;
 en mi cajita tendrás,
 un hermoso rinconcito...
para compartir,
 toda la eternidad. 
*
Eso sí, amada mía,
 por tus huesos yo siempre estaré, 
y retorciendo las costillas...
con las tuyas disfrutaré. 
*
En la noche de difuntos,
 yo te quiero recordar... 
y si murió nuestro amor,
 eso no lo habré de festejar;
*
y para eso yo te pido... 
¡Regresa a mi lado ya!
Entraremos los dos juntos,
 al paraíso de la paz... 
*
¡En una noche de muertos!
 donde de allí, nunca saldrás
de Enrique Nieto Rubio.
derechos reservados. 

domingo, 19 de octubre de 2014

.Vivir en soledad.


Sentado en su silla, el infeliz, giraba y giraba, en su desesperación, con sus ojos llorosos y el corazón partido
va buscando a su amor.

Girando y girando sin parar, pues con sus alas rotas ha terminado... y solamente quiere dormir, y soñar a todas horas. 

El desdichado en sus sueños, por la noche caminando... con ella va; muy juntitos y tomados de la mano,
van gritando por nuevas eras.  Así... transcurren sus anocheceres, colmados de pasiones excitantes; y fantasías
de mil amores; sobre delicados copos blancos de algodón. 


Cuando se presenta el amanecer, de nuevo llora infeliz y amargado; ya que imposible es desplazarse... pues su cuerpo,
está. destrozado. 
Con rabia y desesperación; con vigor se impulsa... fuera de la cama, cayendo todo su ser, de golpe al suelo; pues sus piernas, no le aguantan.

Determinado va... arrastrándose por la superficie,
 gritando atormentado;
tratando de huir de ese encierro,
 que lo mantiene día a día aprisionado. 

Él no quiere más la vida, y a Dios, rogando, implora... envié a la muerte, pues apenas puede sobrevivir; sin saber dónde está, la rosa de su sentir. 


Exhausto y arrastrándose, decide volver a su bendita cama...
para reposar; él desea de nuevo soñar, para unirse con su amada, y pasear por la ciudad. 

Por fin, el sueño ha logrado conciliar, y con ello, ha calmado su tormento; pues consciente está... qué imposible será,
 volver a reunirse con su amor. 

Su amada, por igual, no descansa de llamarlo, suspirando por su amor está; así, los dos desdichados, solo por las noches, en sueños, pueden encontrarse. 

Ella enamorada, a el feliz, se abraza... expresándole que su amor será eterno; él sonríe, prometiendo que en sus sueños, vagando por siempre, permanecerá. 


Ella está en su lecho, más no se puede levantar, postrada, también ha quedado; viviendo en soledad, y totalmente desconsolada, en otra parte de la ciudad. 

En medio su llanto, en su cama abatida, se siente, y ella tan solo quiere morir; pues solo en sus sueños... el amor y la alegría, y esperanza vuelven a surgir.

Son dos amores, que así permanecerán unidos... pues la muerte los castigo, por vivir de forma irresponsable;
 cometiendo errores, y reglas sin cumplir. 

Pareja seducidos por la magia, de la noche eran, conocidos en bares y cabarets; bebiendo sin medida, hasta más no poder,
 para luego acelerar, por calles y avenidas. 


Así pasaban los días, o mejor dicho "desperdiciaban sus vidas" cada anochecer... Hasta que una amarga noche, de loco desenfreno... el siniestro les perseguía, estrellándose contra un muro... sus cuerpos inertes dentro del coche se observaban. 

Pensaron que morirían; pero la muerte, que es astuta, de ellos sus manos apartó. 

Los dejó abandonados a su suerte; para que así, sufrieran y pagarán "en vida"... una dolorosa y amarga condena... por haber infringido, importantes reglas de honor. 

Porque imperdonable es, que ambos bebieran, y se drogaran, Para luego conducir. 
Entre hierros retorcidos, los bomberos extrajeron... sus destrozados cuerpos. 


Se encontraban juntos y abrazados; y de urgencia al hospital fueron llevados... Después de su ingreso, cada uno de los jóvenes, con su respectiva familia, marchó.
 
Ellos insisten en que solo quieren dormir... dormir durante todo el día y la noche; para así, olvidar el dolor...
pasear juntos tomados de la mano, y sin lamentaciones. 

Este cuento lastimoso, de dos vidas destrozadas, por el abuso de alcohol y drogas... así como, de irresponsabilidad... al conducir intoxicados, ha llegado a su fin.

Enrique Nieto Rubio 
*Derechos Reservados* 
Posdata...
¡Abramos los ojos a tiempo! Las drogas y el alcohol... tarde o temprano, siempre terminan por pasarnos la factura.

Están muy equivocados, quienes creen ser libres de hacer con su vida lo que desean... Porque quien abusa de tóxicos y se comporta de forma irresponsable; no solamente se destruye a sí mismo... sino, a todos aquellos que más le aman.

Y no menos importante es el hecho, que injustamente colocamos en grave riesgo... la vida de inocentes, que se cruzan por nuestro camino.

martes, 14 de octubre de 2014

.El llanto de Dios...en un mundo de guerra.por Enrique.

Se cuenta que una vez, cuando se llevaba a cabo una de tantas guerras sanguinarias, y las bombas llovían a mares en todas las ciudades; el llanto de Dios fue tan grande... que inundó los cielos, y se desbordó por toda la faz de la tierra.

Los explosivos derribaban todo a su paso, matando miles de hombres, mujeres y niños. 


No existía lugar alguno donde resguardarse, pues edificios y montañas fueron derribados... era el horror más grande, nunca antes vivido por ser alguno. Ante tal destrucción y desolación... Dios se encontraba devastado ante la pérdida de su amada creación.

Algunos decían que sus lágrimas, eran enviadas como bálsamo para refrescar el infierno que en la tierra se vivía... y otros exclamaban que era el castigo por la falta de amor que se existía en la humanidad.

Su llanto, la tierra entera oscureció y todo lo que en ella sobrevivió se tornó en color gris; el verdor de árboles, flores y plantas se desvaneció. Todos cayeron en una depresión tremenda, pues la belleza del mundo se nubló; al cubrirse todo de matices grisáceos.

Las personas lejos de reflexionar y modificar su forma de proceder... fueron aún más infelices y crueles; pues constantemente los vecinos se golpeaban, los padres eran violentos entre ellos mismos, los hermanos se masacraban, los pueblos se odiaban... Nadie concebía amor en su corazón por los demás.

Las mujeres que estaban embarazadas y que no podían dar marcha atrás en el nacimiento de sus hijos, los daban a luz... más no eran bienvenidos con ilusión y alegría.

Después ninguna otra volvió a quedar encinta; pues el sexo no tenía sentido... nadie vivía en armonía o era feliz.

El ambiente en las calles era digno de una película de terror, pues la sangre parecía emanar en las calles sin que nada pudiesen hacer al respecto... dando lugar así, al término de la guerra.

Sin embargo, la degradación del ser humano seguía imperando; pues para ese entonces, a pesar de no contar con lo básico para subsistir...ni tan siquiera alimento, parecía que todo les daba lo mismo; pues no hacían esfuerzo alguno para unirse y enmendar sus errores.

Transcurrieron los años, todos se encontraban endurecidos de corazón, al punto que cuando perdían un ser querido... nadie se lamentaba o lloraba.
Algunos dejaban abandonados a sus hijos en los hospitales y parques... sin que a nadie le importara; muriendo los infelices en condiciones espantosas, ya fuese por enfermedad, de hambre o de frío.

Las enfermedades y afecciones estaban a la orden del día, por lo que eran muchos quienes perdían la vida... y el desdén y poco aprecio por la vida, llego el límite...

Por todo rincón de la tierra, se encontraban cadáveres por doquier..., ya que nadie los enterraba; y a sus gobernantes, por igual, nada hacían por buscar una solución; que les permitiera salir de su inmundicia y degradación.
Todos habitantes del planeta, parecía que morirían... estaban al borde de la extinción. Y a nadie le importaba.

Un bendito día, comenzó a caer una suave y deliciosa llovizna... y cuando escampó, todos se maravillaron, al ver un hermoso arco iris, el cual se podía observar en toda la tierra, de entre todo el paisaje gris que imperaba... Este se lucía radiante con sus vibrantes colores.

Excepcionalmente, las personas que contemplaban el fenómeno de la naturaleza, comenzaron a reflejar en sus rostros endurecidos, sonrisas que les iluminaban... más con en el transcurso de dos horas, el espectro desapareció, volviendo a dejar a todos envueltos en una densa bruma color gris.

Una tarde fría y en la cima de una montaña, se encontraba desnudo y moribundo, un niño abandonado... llamado Antonio.

Su estado era en extremo delicado, pues estaba desnutrido y casi ciego, a causa de una grave infección; quien había llegado a ese lugar para dejarse morir. 

El pequeño apenas respiraba, cuando una tenue llovizna comenzó a caer... y el arco iris volvió a aparecer.

No obstante, con el paso de los minutos, una torrencial lluvia se presentó. El estado físico de Antonio era tan precario... que al caer las gotas de agua sobre su piel... estas lo lastimaban, provocando pequeñas heridas, tal cual si de cuchillas se tratara.

Muchas personas que se encontraban en la intemperie, comenzaron a morir... pues el agua del diluvio, estaba bajo cero grados... y cuando la lluvia cesó, una vez más el arco iris apareció.

Antonio sonrió y en su último aliento, cogió una china, la puso en su paleta y la lanzó con toda la fuerza que le restaba... tornándolo de color naranja, el cual al explosionar provocó un gran estruendo... el cual resquebrajó el arco iris; dando lugar así, a una lluvia de colores, que toda la tierra abarcó.

Las personas, como por arte de magia, comenzaron a saludarse, abrazarse y a besarse de la emoción.

En todo el mundo, se podían observar chispitas de colores, haciendo que todos sus habitantes alucinaran, tal cual si se encontraran en un mundo de fantasía... pues todo el globo terráqueo se iluminó.
Acto seguido, una fuerte adrenalina les invadió, y se dispusieron a recoger cadáveres en putrefacción, para brindarles santa sepultura.

Mientras tanto, las mujeres y los niños ayudaban limpiando todo a su alrededor... pues el mundo sin color y sin vida había llegado a su fin. El mundo había recuperado su belleza y el color... y bajo los rayos del sol radiante, entibiaban sus cuerpos lacerados.

No obstante, el pobre Antonio no fue parte de la celebración, pues desnúdo, quedó tendido sobre la cima del monte; más su cuerpo en estatua, de brillantes gamas de colores, se convirtió. Su rostro quedó observando al cielo, con una sonrisa dibujada en su rostro... y el tirachinas, en su mano derecha.
Cuando lo encontraron, lo llevaron hacia la ciudad; y lo colocaron en el centro de la ciudad, en la plaza mayor... pues para ese momento, se le consideraba el salvador del mundo.

Después algo extraño sucedió, pues la estatua de Antonio apareció en todos los pueblos y ciudades del mundo... la cual sirvió como recordatorio, del amor y respeto que debían de profesarse unos a otros... y por supuesto, jamás una guerra se volvió a concebir.

Enrique Nieto Rubio
*Derechos Reservados*


viernes, 10 de octubre de 2014

.Libertad de Enricostro. poema protesta.


Libertad que tanto tiempo nos costó,
 no me la quieras quitar;
pues es mi alma y pasión, 
que dentro de mí es un cantar.


Ya no pierdas la razón, 
tiempos malos ya vivimos... 

o acaso no recuerdas,
 que todo era, sin justicia y sin razón. 

Los ricos nos machacan,
 pues todo nos lo quieren robar. 

Una libertad, que un día,
 
 con arduo esfuerzo conseguimos. 

Y ahora de nuevo me la roban,
 
para llevarme a sufrir. 

Que no te callen la boca... 
que no opriman tu sentir, 

que los derechos son soñados. 
¡No los veamos morir! 

Que sí mueren los derechos, 
libertades, y razones... 

¿Qué nos quedará en esta vida? 
¿de asesinos y ladrones? 

Porque mientras el pueblo se muere, 
ellos se llenan los calzones; 

robando a diestra y siniestra... 
y nosotros aún más pobres.


¡Ser por siempre libres hombres!
que es vuestro derecho! 


Enrique Nieto Rubio
*Derechos Reservados*

miércoles, 8 de octubre de 2014

.No me llores niña, de Enricostro.


¡No me llores niña!
 No me llores niña,
 sabes que volveré; 

con un ramo de rosas,
 para que te sientas bien. 
Aunque lejos me vaya,
 en ti solo pensaré... 
y te escribiré todos los días, 
pensando en nuestro querer. 
No me llores niña linda, 
que contigo yo estaré, 
te mandaré unas caricias,
 unos besos y todo mi querer. 

Que aunque lejos me encuentro,
 cerquita yo estaré, 
pues mi corazón y el tuyo,
 siempre besándose están. 
No me llores tú mi niña, 
que sin ti me moriré... 
y volveré muy pronto,
 para darte mi querer. 
Y si quieres nos casamos,
 para vivir toda la vida,
 junto a tus pies. 
¡Más no me llores niña!
 que pronto volveré! 
Enrique Nieto Rubio 
*Derechos Reservados*

.Quiero acariciarte de Enricostro.


Quiero acariciar tu cuerpo mi amor.
.ese cuerpo inmaculado,

que con solo rozarte los dedos, 
 mi amor,
 se me erizan los cabellos;
y me pongo,
 como ese cordero, niña,
 que aun sin destetar...
atrae a su mamacita querida,
 para poderse a gusto arropar.

Y me muero,
 con solo rozar tu pelo...
 tu cabello negro, 
sedoso y fresco;
 que con la luz del sol parece prender,
esa llama de toda mi pasión,
 y más anhelados deseos. 
Sentir tu cuerpo embriagador, 
que me eclipsa y nubla mi razón.


Desnudemos nuestras almas, 
y envolvámonos en un baile de deseos;
 que incluso hasta el fin de los tiempos, 
no podamos deshacernos.

Si mi amor... ¡Eso
s lo que anhelo!
 y quiero junto a ti!
Dime si tú lo que quieres,
 y dichoso cumpliré con todos
tus deseos.

Amanecer 
después de toda una noche...
muy pegado a tu querer, 
y así juntitos, sentirte, abrazarte... 
y besarte hasta otro anochecer,
Enrique Nieto Rubio
*Derechos Reservados*