Sabes mi amor,
que yo soy el aire que respiras.
que yo soy el aire que respiras.
También sabes que sin mí,
no puedes vivir, lo sabes verdad.
no puedes vivir, lo sabes verdad.
Cuando te duchas,
quien acaricia tu cuerpo,
quien acaricia tu cuerpo,
soy yo verdad.
Cuando vas a descansar,
quien duerme contigo,
quien duerme contigo,
soy yo verdad;
quien entra dentro de ti,
y te hace sentir.
Yo verdad.
Cuando sollozas, tus suspiros,
son los míos... lo sabes;
son los míos... lo sabes;
pues para ti, soy como un Dios,
y esto también lo sabes.
y esto también lo sabes.
Viajando libre, voy por los valles,
surcando las montañas;
surcando las montañas;
perpetuamente voy acariciando,
y refrescando los prados.
y refrescando los prados.
Viajo hasta donde te encuentres,
para estar en tus sentires;
para estar en tus sentires;
ofreciéndote exquisitos aromas...
y llenándote de vida.
y llenándote de vida.
Pero si me maltratas,
me menosprecias y no me cuidas,
me menosprecias y no me cuidas,
con bombas de hidrógeno,
o lo que sea...me vuelvo hostil.
o lo que sea...me vuelvo hostil.
Desataré tornados para castigarte;
es así, lo sabes verdad.
es así, lo sabes verdad.
Crearé tsunamis, terremotos,
etc., para haceros gran daño.
etc., para haceros gran daño.
Si me envenenas,
a través de mí recibirás,
a través de mí recibirás,
vuestro veneno,
y nada podrás hacer al respecto...
¡Lo tendrás que respirar!
¡Lo tendrás que respirar!
Pues soy rencoroso, y soy inmortal a la vez;
lo sabes verdad.
lo sabes verdad.
Pues fui, he sido y seré...
"El mismo de todos los tiempos".
"El mismo de todos los tiempos".
Lamento que vuestros hijos,
a quienes acaricio y tanto mimo;
a quienes acaricio y tanto mimo;
y a quienes la vida les brinde...
desde el momento de nacer;
desde el momento de nacer;
también pagarán muy caro,
por vuestra total falta de sensatez;
por vuestra total falta de sensatez;
y vosotros seréis,
los únicos responsables,
de su trágico final.
los únicos responsables,
de su trágico final.
¿Sabes? Todavía tienes tiempo,
de cambiar, y de reflexionar...
de cambiar, y de reflexionar...
Más si no cambias,
tu forma de proceder,
o no deseas comprender;
tu forma de proceder,
o no deseas comprender;
cuando el fin llegué,
y vuestro cuerpo putrefacto,
a rayos huela;
y vuestro cuerpo putrefacto,
a rayos huela;
sin piedad os lo restregaré,
por la nariz, pues a mí no me hará daño.
por la nariz, pues a mí no me hará daño.
Porque yo soy el viento,
el aire que respiras y te permite vivir...
el aire que respiras y te permite vivir...
Sin mí, tú no eres nada,
así pues... ¡Me cuidas o te mueres!
así pues... ¡Me cuidas o te mueres!
Enrique Nieto Rubio
*Derechos Reservados*
Colabora en imágenes,
Silvia Regina Cossio Cámara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.