lunes, 22 de agosto de 2022

Mi querido diario, el comienzo, de Enricostro. cpl.XVII.

 






Mi querido diario, el comienzo, de Enricostro.

Esta mañana he pasado por el bar, a las seis de la mañana he abierto muy temprano, pues he tenido una noche muy mala en soledad.
Ya hacía mucho, que no estaba solo y me tendré que acostumbrar claro.
He pensado, que are turnos completos, para dar descanso a los trabajadores,
me he pasado todo el día aquí
y ya es muy tarde.
El día se me pasó volando, todo ha ido muy bien
lo recaudado sobre pasa, lo estimado por mí y les daré una gratificación a todos por el esfuerzo.
Son las Una de la madrugada, y la compañera Rafia se ha quedado conmigo a cenar en el bar,
pues ella quería saber como ha ido todo,
ya sobre las dos y media la he llevado a su casa, es muy buena chica, y lo da todo,
ya mañana será otro día,
así que me he ido a la cama, pensando en ellos
la he llamado antes de acostarme, pues allí ahora es de día,
me dice que está muy animada y que me quiere mucho y mi niño lo mismo.
Enrique Nieto Rubio,
derechos reservados.

DD.M.DD.DO.JJ.

Mi querido diario. El bar de Enricostro, cpl. XVIII.




 El bar de Enricostro.

Mi querido diario, están pasando los días y mi querida novia me dice que este año ya no vendrá.
Bueno, tendré que armarme de valor, pero será muy duro.
Todo marcha muy bien, el negocio va fantástico, y muchas noches salimos Rafia y yo vamos al cine y al baile, pues ella no tiene novio, y lo pasamos muy bien, yo cada noche se lo cuento todo a Mariela.
Aunque dice, que me entiende también, la noto algo desconfiada.
Esta noche, precisamente se ha quedado Rafia, viendo una película en casa, aunque la película era normal, tenía escenas de sexo y se nos ha ido de las manos, hemos hecho el amor, sí, supongo que solo es eso, una folla amiga, como se suele decir, ahora me arrepiento de esto, pero anoche fue una cosa extraña, como si fuera un sueño, no lo sé.
Bueno, me temo que he metido la pata y esta noche me espera parda, creo que no me va a perdonar.
Bueno, es lo que me esperaba, le he dicho:¿¿Qué la quiero mucho y que fue solo un impulso sin darnos cuenta?, ¡sí, si me ha dicho a la mierda, te vas tú y ella! Y me ha colgado el teléfono.
Sigo llamándola, pero lo ha apagado.
Enrique Nieto Rubio.
Derechos reservados.
DD.M.DD.DO.CP.

Mi querido diario. Mariela no me coje el teléfono, de Enricostro.cpl.XIX.

 Mi querido diario, Mariela, no me coge el teléfono.

Ya ha pasado más de un mes y solo ha hablado con Manuel, el encargado, y le ha dicho:que vendrá a finales de año, y que no quiere verme cuando venga.
Bueno, la comprendo, aunque ella hizo lo suyo con aquella chica que ya ni me acuerdo de su nombre y yo jamás se lo recrimine.
No sé qué va a pasar, pero esperaré a que venga, pues quiero mucho a ella y a mi niño.
La esperaré, ya lo creo, quiero que me perdone, pues en esto del amor ufff todo me puede,
Que puedo hacer, estoy muy apenado.

Enrique Nieto Rubio.

Derechos reservados.

DD.M.DD.DO.CI.

Mi querido diario el encuentro.de Enricostro. cpl.XX.

 Mi querido diario el encuentro.


hoy temprano, he marchado para el bar, y cuando llegué, frente al bar, hay una confitería muy bonita y con un precioso escaparate, para los golosos del dulce, y me ha llamado la atención. Una señora, alta, esbelta y muy elegante, además de preciosa, cabellos morenos y muy largo por detrás y recogido a los lados.
Así que como me ha llamado, tanto la atención, que quise verla de cerca.
Llegué por detrás, tenía un vestido blanco con transparencias, y le daba toda la luz directamente y se le notaba un tanga negro perfectamente y le hacía un culo maravilloso.
Ella se volvió, cuando casi la tenía encima, y al verle la cara:
¿Silvia eres tú?
¡Enrico, eres tú, uff qué alegría, chico, que es de tu vida!
¿Bueno trabajo aquí en el bar de enfrente?
Bien, ven, he bajado, a comprar unos dulces para desayunar, vivo aquí arriba, por qué no subes y charlamos un rato?
¡si claro que alegría me has dado chica!
entramos en el ascensor y nos abrazamos fuertemente, ella olía maravillosamente a canela y vainilla, no sé si era ella o los dulces, pero de todos modos, está para comérsela!
:¿qué te has casado no?
¡con el amigo Andrés, al final me harté de él, y lo mandé bien lejos, era un cretino!
Pero tú qué guapo estas, unnn... nos dimos otro fuerte abrazo, a sí, ternito y acogedor,
bueno charlamos todo el día, almorzamos y hasta cenamos, pues es buenísima cocinera, con unas manos grandes y suaves.
Bueno, ya te quedarás a dormir no,
cierto es que con la penumbra de las farolas de la calle, no apetecía para nada salir, además de ese frío que hacía fuera.
Y que siempre la he deseado con locura y ella ami también,
fue un amor de la lejanía y cuanto nos quisimos, aunque el tiempo ha pasado, ella está aún más hermosa.
Ha sido una noche como ninguna, era nuestra noche, jamás vi un cuerpo tan perfecto como el suyo, esto ha sido lo más, así toda una noche de gran pasión, hasta quedar rendidos.
Ya ha amanecido y me he sentado en la descalzadora, contemplando ese cuerpo desnudo, tan bonito y suave, hasta que ella ha despertado.
Enrique Nieto Rubio.
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DD.M.DD.DO.IP.

Mi querido diario, después de esta velada, de Enricostro. cpl.XXI.

  Mi querido diario, 

Después de esta entrañable noche, que nunca había soñado, he llamado a Mariela, y me ha dicho muy enojada que por ahora no vendrá, que su padre está Malito, y que además no quiere ni verme,
bueno entonces no le diré nada de este desliz que repetiré en estos y otros días,
si se lo he dicho a Silvia, todo lo que tengo con Mariela y que tenemos un niño,
me ha dicho qué loco estás.
Pero bueno, así soy yo.
Nos hemos ido al cine, a ver una de amor, bueno, más bien es un musical,
cierto es que estamos maravillosamente bien.
Me ha contado tantas cosas al salir del cine, pues aunque la noche es fresca, paseando por el parque, se está maravillosamente,
terminando en su casa, bueno lo que vino a continuación, entre copas de vino y lo demás, es que ni se puede contar. Hasta la próxima.
Enrique Nieto Rubio.
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sábado, 13 de agosto de 2022

..La jardinera de Enricostro(,solo para mayores).

 Año mil novecientos sesenta y tres.

La jardinera.

Una linda muchachita de ocho hermanos y ella era la mayor, entonces tenía dieciséis años. Bueno, yo aún era un par de años más pequeño, pero ya me fijaba en todo, y hacía lo que los mayores hacían como mi padre, y mi abuelo, y además todos los vecinos varones de esta comunidad.

A las diez de la mañana, esta muchacha iba a nuestra vecindad, era jardinera y muy ligera de ropa, apenas cogía la azada, enseñaba todo el culo, y además de no tener braguitas, todos la disfrutaban.

las ventanas se llenaban a escondidas, de ojos mirones y sádicos.

bueno yo no entendía nada de eso, y muchas veces me asomaba y hablaba con ella.

: ¿hola Chari, como estas esta mañana?

¡aaaa ya lo ves Enrique muy bien!

¿si eso dice mi abuelo jajaja? ¡Si lo creo!

Ella se agachaba muchas veces y cogía monedas de 25 pesetas, cincuenta pesetas y hasta de veinte duros, y cuando daban las una charlábamos, y ella me explicaba que antes de

que ella llegara, todos los hombres les echaban monedas allí donde ellos les pudieran ver, a escondidas de sus esposas. Sí me contó que lo hacía desde hace tres años, pero que a ella no le importaba, pues en casa había muchas bocas por alimentar, y eso le hacía un triple sueldo,

bueno yo siempre le guardé el secreto,

cuando se iba a marchar a las cuatro de la tarde, nos metíamos en la leñera, donde ella guardaba todas las herramientas, y se sentaba delante de mí, se habría las piernas ensenándomelo todo y además me dejaba tocarla por todos lados y la besaba.

así fuimos pasando los días, y un día lo hicimos y al otro y al otro, así mucho tiempo, madre mía, era maravillosa.

Pero algo dentro de ella, empezó a engordar y engordar ufff se armó una buena, cuando se enteraron todos bueno los mayores lo vieron normal por cómo iba ella, y sus padres la echaron de casa.

Yo hablé con mis padres y les dije que había dejado a una chica embarazada, y entonces, mis papás la acogieron rechina dientes.

la pusieron en mi dormitorio con la intención de casarnos pronto y eso hicimos.

Poco después, mi papá me buscó un oficio de mecánico, y allí se fue formando mi vida, y la de ella,

tuvimos un niño guapísimo, y ella dejó la jardinería para sembrar conmigo zanahorias, por las noches. y lo mejor es que fuimos muy felices siempre.

Todos cuando me veían y se imaginaban a ella desnuda y ami sembrandola. saludos.

Enrique Nieto Rubio.

lo cierto es que tenía un conejo tremendo de gordote y sabroso. en su gallinero.

Enrique Nieto Rubio.

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IC.M.DD.DO.CP.